Son más de las siete de la tarde. Creo. No tengo reloj y el esfuerzo de sacar el móvil del bolsillo me parece excesivo. Ya ha anochecido y las luces de Navidad me molestan. Qué despilfarro de dinero. He dejado la compra del súper a mi lado en el banco, para así evitar que alguien se me acerque. Odio esta ciudad. Odio sus habitantes, coches, perros y ruidos en general. Ojalá … [Leer más...]