Ya no recuerdo qué día fue, la verdad. Su compañera, María Bengoa, hablaba sobre la literatura y sobre el gusto de leer en una conferencia de la universidad. Al acabar, tuve la oportunidad de contarle a Ramiro la historia de Ritxar. Se interesó por él y se interesó por mí. Encantado, ¡encantadísimo!, me uní a ese grupo de mentes sensibles. Sole, Iñigo, María y Ramiro. Tomamos … [Leer más...]