Propósito

Volvemos. Y en qué momento. Cada vez que La Espiral echa a rodar, parece concurrir con sucesos y revelaciones que sacuden el planeta. Sucedió, por ejemplo, en nuestros inicios con el Euromaidán de 2014; y se arremolina ahora de nuevo, como si el conflicto en Ucrania la impeliera.

El análisis holístico podría llevarnos a poner en tela de juicio el propósito de nuestra existencia. Al fin y al cabo, todo parece empequeñecer ante la guerra. La injusticia adquiere una sustancia inusitada, se vuelve más presente que nunca; la división entre iguales se recrudece, a medida que los viejos argumentos comienzan a devolver el eco. Parece un momento para la acción: nuestra mente primitiva se pone alerta. Otros objetivos encogen, carecen de repente del combustible necesario para continuar con su rumbo.

Pero tal y como no inventamos esta duda, tampoco uno de sus posibles remedios. Lo que Camus denominaba el sentido de la vida no es otra cosa que un sumatorio de intenciones, que podemos mantener vigentes e insuflar de vida con nuestras acciones, que son las que pueden marcar una diferencia. Así, nosotros nos mantenemos estoicos en la misión de crear y alimentar una pequeña comunidad literaria, tratando de cumplir el propósito y su sentido vital; solidarizándonos al mismo tiempo con las víctimas inocentes de un conflicto que, como todos, no es más que un movimiento de ajedrez para los que mandan.