Un secreto jamás nombrado, encadenado a la Muerte hasta que se aburrió. Fue condenado a empujar eternamente un peñasco hasta lo alto de una montaña. Tragó el silencio y pagó el precio de las pasiones de la tierra. Así todos los días de su vida. Yo rezo todas las noches en mi jardín de Getsemaní, Para no ser consciente de que mi vida es igual de … [Leer más...]
Cuarto M. número trece
Permíteme que te diga que distraerse es siempre la peor ayuda para un pobre hombre como tú, perdedor de últimos trenes. La denegación de auxilio justificada puede llegar a ser un placer, en verdad se goza con el mal, y el diablo no suele hacer planes, antes de salir de casa sólo fuma un cigarrillo y enciende la mecha, la tuya … [Leer más...]