Ramiro, en el Taller, cuando alguien leía en voz alta, se apoyaba contra el respaldo de su sillón orejero, cerraba los ojos haciendo un esfuerzo de atención y estiraba el cuello como una tortuga milenaria que volviese año tras año a la misma playa. Seguramente, esto formaba parte de su oficio, el oficio de narrador. Cuánto me asombraba su capacidad de escucha. … [Leer más...]
Recuerda, oh, recuerda: Ramiro Pinilla in memoriam
Ya no recuerdo qué día fue, la verdad. Su compañera, María Bengoa, hablaba sobre la literatura y sobre el gusto de leer en una conferencia de la universidad. Al acabar, tuve la oportunidad de contarle a Ramiro la historia de Ritxar. Se interesó por él y se interesó por mí. Encantado, ¡encantadísimo!, me uní a ese grupo de mentes sensibles. Sole, Iñigo, María y Ramiro. Tomamos … [Leer más...]