Cuánto oro y ámbar te guardas en tu mirada de ojos tristes. ¿Qué me quieres pedir? Por ti doy más que caricias y besos. Si tú quieres, podría rastrillar con mi mano tu espalda de negro cerrado hasta que las marcas fuesen como surcos en la arena; cinco caminos que mis dedos trazarían con esmero. A cambio, tú bailarías claqué en los pasillos con donaire y tus garras … [Leer más...]
Si se callase el ruido
Si se callase el ruido, podría escuchar el aire colarse por los orificios de tu nariz, bajar por la laringe, atravesar los bronquios y abrazar tus pulmones. Si se callase el ruido, percibiría el movimiento de tu pecho, de arriba a abajo, constante, discreto, imperceptible apenas, monótono, quieto. Si se callase el ruido, podría … [Leer más...]
Reflejo
Reflejo. Yo, igual que tú. Tú, igual que yo. Alzo la mano, Alzas la mano, Ladeo la cabeza, Ladeas la cabeza ¿O eres tú quien se mueve, y yo quien imito? A veces hasta dudo. … [Leer más...]
Conversación con Jesús
Le dije que era ruidoso porque así sonaba el motor de su corazón. Dijo ¿Va a pilas? No, a magia. ¿Está bajo las costuras del pelo? Claro. ¿Podemos deshacerlo y mirarlo? Pero se perderá para siempre. ¿No te vale acaso con que funcione? Tenerlo para ti. Ya... Pero quiero saber. … [Leer más...]
El misterio de la trigonometría
Habrá que sacar la basura. Afuera en la calle llueve y me pasa contigo un poco como con la basura. Lo que fue suculento, un sueño de carne o de pescado, se ha deshecho. Sin embargo, me deshago de la bolsa un poco más tarde de lo que sería razonable. … [Leer más...]
Miradas de peces
Es como si el corazón se hubiese descolgado ,o hubiese caido por su propio peso, para pasar a bombear sangre desde el lugar en que habitualmente se ubica el estómago. El hilo por el que se ha efectuado el descenso parece atascado en la garganta, y la imposibilidad de respirar con normalidad me despierta súbitamente a las dos menos cuarto de la mañana. Maldito reloj biológico … [Leer más...]
Del tipo que come ansioso frente a mí
Personalmente me da mucho asco ver comer a la gente,y cuando te pones delante de mí… Paladar que te ensanchas paladar, entre cerrojos de marfil. Más pajizosque blancos e inmaculados. De la boca brotan jugos condensados,espuma blanca: sed de uno mismo;estigma reseco que impregna olfatos;de olor colérico, de olor ácido. Amigo,aún más animal que humano,un poeta te hará … [Leer más...]
Vis
El cementerio de la isla de Vis se abre sobre la bahía. Oráculos improvisados en forma de piñones aconsejan casarme por la iglesia. También aconsejan retirarme con mi esposa a una cala de Dalmacia y vivir a base de pan y queso de cabra. Me detengo ante la fotografía de una joven difunta. Las cigarras chisporrotean entre los arbustos. Una familia … [Leer más...]
Hace unas semanas me quedé seca como un abrojo
Hace unas semanas me quedé seca como un abrojo. Viví entre estudios de Galton, silogismos categóricos, apotemas y aspectos de la fisiología neuronal que deseo ni me nombren. Hice el ejercicio justo; levantarme a coger unas galletas, colocarme bien el flequillo, ensimismarme en tal y tal arruga... Después tomé puré, zumos, bonito en lata. Viví una … [Leer más...]
Tu cama/ Serendipia
Serendipia Me gustaba acariciar tu boca mientras dormías, leer el lenguaje en braille de la rugosidad de tus labios, la sublimación del origami, en cada uno de los pliegues de tu piel. Medir el tiempo según la cadencia de tu respiración. Adoraba intentar despertarte, incluso cuando dormías sin sueño. Recorría las falanges de tus dedos, buscando accionar tus … [Leer más...]